MALLORCA, POLLENSA, ESPAÑA

Cómoda, práctica y escondida en las estrechas calles de Pollensa se encuentra Casa Sebas, que es una moderna casa adosada de 4 dormitorios. Distribuida en tres plantas, Casa Sebas es una opción perfecta para cualquiera que busque una auténtica experiencia isleña y alojarse aquí le hará sentirse parte de esta ciudad vibrante y culturalmente rica donde el ritmo de vida parece no haber cambiado durante siglos. Tener todas las comodidades y una increíble variedad de restaurantes y tiendas a solo unos minutos a pie significa que el coche no es esencial.

En el interior, el alojamiento fluye de forma elegante y fluida en tres niveles. Un salón de planta abierta de buen tamaño, un comedor y una cocina moderna totalmente equipada están situados en la parte delantera de la propiedad y conducen directamente a la compacta terraza trasera y al área de la piscina (2 mx 5 m).

Las puertas dobles, adyacentes a la cocina, lo invitan al jardín/patio donde podrá disfrutar de un chapuzón en la piscina con total privacidad. Junto a la piscina encontrará una mesa y sillas exteriores, tumbonas y una ducha exterior para su comodidad. Disfrute de las noches relajándose rodeado de estos tradicionales muros de piedra contemplando las estrellas. También existe la opción de sentarse en dos balcones más, en el primer piso y en el piso superior, por lo que, aunque compacto, hay otros espacios para relajarse.

Una escalera conduce al primer piso donde encontrará 2 habitaciones dobles que comparten un baño y una habitación doble con baño privado/ducha. En la planta superior hay otro dormitorio doble con baño privado/ducha. Todas las habitaciones están decoradas con buen gusto y cuentan con armarios empotrados y aire acondicionado.

Dado que un coche no es esencial, puedes utilizar los servicios locales de taxi y autobús para desplazarte, y durante los meses de verano, son abundantes. Tenga en cuenta que durante las fiestas locales habrá grandes multitudes y mucho ruido en la ciudad de Pollensa, estas tendrán lugar durante el desfile de Semana Santa, la Fiesta Blanca y el 1 y 2 de agosto.

Pollensa – ubicada en el centro: Pollensa es una encantadora ciudad mallorquina repleta de antigua arquitectura de piedra rubia. Pollença no se parece a muchas otras ciudades que se han rendido al turismo. Aunque hace tiempo que aquí atrae a los turistas, Pollensa ha aprendido a aceptar y adaptarse al turismo sin perder el alma. Pasee por las calles que conducen a la iglesia para descubrir establecimientos tradicionales que venden una variedad de alimentos, artesanías, así como cafeterías, restaurantes y bares.

Lo más destacado de la semana es el mercado auténtico y tradicional que se celebra todos los domingos por la mañana. Llegue temprano para asegurarse las frutas, verduras, carnes y pescados más frescos. Los escalones del Calvari ofrecen la mejor vista de la zona, pero ten en cuenta que para llegar a la cima hay que subir 365 de ellos. Sin embargo, la subida vale la pena y las vistas definitivamente no decepcionan desde la cima.

Puerto Pollensa, a sólo 7 km de distancia, ofrece maravillosos paisajes, hermosas playas de arena y un ambiente relajado y amigable, hacen de Puerto Pollensa un destino favorito para muchos. Con hoteles en primera línea de mar que aún conservan un aire anticuado, ya que fueron construidos mucho antes del auge del hormigón de los años 60.

Hoy en día, la ciudad atrae principalmente a familias británicas y madrileñas que buscan algo más que el ajetreo y el bullicio de los centros turísticos de la costa sur. Con maravillosos paisajes, hermosas playas de arena y un ambiente relajado y amigable, Puerto Pollensa es un destino favorito para muchos.

Cala Sant Vicente, a sólo 5 km, es una pequeña ciudad turística en el noreste de Mallorca, España. Consta de tres pequeñas playas, además de algunos bares y restaurantes que atienden a turistas. Situado en un extremo del pueblo se encuentra el hipogeo de Cala Sant Vicenç, quizás el hipogeo más espectacular de Mallorca.